https://efe.com/castilla-y-leon/2025-02-06/los-conjuntos-historicos-no-quieren-convertirse-en-mausoleos/
Imagen de archivo de la vila de Madrigal de las Altas Torres (ÁVILA ), lugar natal de la reina Isabel la Católica, desde las ruinas del monaterio donde falleció Fray Luis de León. EFE/ RAÚL SANCHIDRIÁN
Los conjuntos históricos no quieren convertirse en parques temáticos o mausoleos
Valladolid (EFE).- La mayoría de los municipios que en España gozan de la declaración de Conjunto Histórico se encuentran en el medio rural y ven en el turismo una opción de supervivencia, pero no quieren convertirse en parques temáticos o mausoleos, como han explicado este jueves en Valladolid durante el I Encuentro Nacional.
«Gestionar un conjunto histórico es muy complicado, requiere un sobreesfuerzo, dineros e ideas para que sean elementos tractores, generadores de desarrollo económico en lugares que deben ser espacios de habitabilidad y no solo parques temáticos o históricos», ha explicado David Esteban presidente de la Red de Conjuntos Históricos de Castilla y León.
El 70,3 por ciento de los 730 conjuntos nacionales «se encuentran en la España rural», pero en el caso de Castilla y León el 59 por ciento se asienta en localidades de menos de mil habitantes, y uno de cada cinco en poblaciones con un censo inferior al centenar de vecinos, ha añadido Esteban, también alcalde de Medina de Rioseco (Valladolid).
La economía del patrimonio
Sus habitantes «son guardianes, legatarios que se relacionan con el espacio en el que viven y transitan» en un medio rural donde ser Conjunto Histórico «es una oportunidad para tener un proyecto de vida, un negocio, una empresa dentro de un espacio con clientes potenciales donde el turismo es clave, debe ser un motor», ha dicho.
El delicado equilibrio entre la protección del legado histórico y su usufructo económico exige ayuda por parte de las instituciones, «especialmente en el medio rural porque las herramientas muchas veces no son las más óptimas», ha apostillado durante la apertura del I Encuentro Nacional de Conjuntos Históricos, que se celebra este jueves y viernes en Valladolid.
Recursos limitados
«Vamos a tener recursos para atender a todas las necesidades? Posiblemente no», ha respondido a esa cuestión la directora general del Patrimonio Histórico y Bellas Artes, Angels Albert (Ministerio de Cultura), quien ha apelado a «complicidad absoluta» de todos los actores implicados, «cada uno desde su lugar», ha precisado.
Como punto de partida, la directora se ha referido a la conveniencia de «sensibilizar a los ciudadanos sobre la necesidad de defender lo que es nuestro como seña de identidad y elemento de beneficio económico.
Cualquier actuación, ha insistido en este punto, no debe pasar nunca por «expulsar a los ciudadanos de los centros históricos: eso no puede volver a pasar» porque los conjuntos «deben ser visibles para mayores, jóvenes, niños… para que no sean mausoleos».
Las administraciones públicas, cada una desde su parcela, deben contribuir a todo ello, como el Gobierno a través de las ayudas inscritas en el programa del 2% Cultural, pero también los propietarios privados de los bienes patrimoniales situados en esos conjuntos protegidos, con derechos y obligaciones, ha subrayado.
En todo caso, las iniciativas que se acometan en la consecución de todos estos objetivos, ha continuado, deben pasar por un «ejercicio de aprovechamiento, de revitalización, de hacer vivos y sostenibles» los conjuntos históricos, «buscar soluciones y avanzar juntos», ha resumido la directora general.
Retos de futuro
De todo ello se hablará estas dos jornadas en Valladolid, que ha reunido a alcaldes, ediles, profesionales y técnicos de numerosos municipios de España: Lorca (Murcia), Sigüenza (Guadalajara), Allariz (Orense), Hervás (Cáceres), Madrigal de las Altas Torres (Ávila), San Esteban de Gormaz (Soria), Urueña (Valladolid) o Valderas (León), pero también de Madeira y Almeida (Portugal); de Sibenik (Croacia) y Bérgamo (Italia).
Estos desafíos son la prospección de la economía del patrimonio, el fortalecimiento de la imagen como conjunto turístico y las buenas prácticas compatibles con la protección del patrimonio histórico y artístico.
«Hay que dar voz a quienes dan vida a sus territorios pero necesitan ayuda, recursos y compartir soluciones desde la cercanía, el compromiso, la lealtad y las ganas de mejorar», ha concluido David Esteban. EFE
Comentarios
Publicar un comentario