Madrigal se llena para el 'Toro de San Nicolás'
M.E
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El buen tiempo acompañó a una jornada festiva marcada por la elevada presencia de público y la ausencia de incidentes de importancia en torno a la suelta de los dos toros en la villa
Madrigal de las Altas Torres, uno de los municipios con más arraigada afición taurina de la provincia de Ávila, volvió a cumplir ayer con una de sus tradiciones, el llamado ‘Toro de San Nicolás’, recuperado hace una década por la Asociación Amigos de Madrigal para revitalizar la fiesta y que desde entonces se celebra con motivo del día del patrón de la villa, San Nicolás de Bari.
Este año el sol fue el gran protagonista, lo que, junto al adelanto de la cita en media hora, contribuyó a impulsar si cabe la afluencia de público, que fue similar e incluso superior a la de otros años, según cuentan algunos fieles asistentes. Así, unas cinco mil o seis mil personas volvieron a darse cita con un festejo popular del que disfrutaron de lo lindo los aficionados y que, además, se desarrolló sin incidentes de importancia.
Con la organización de la Asociación Cultural Taurina San Nicolás, la plaza del Cristo volvió a ser el punto de partida para la suelta de los toros desde el cajón, modalidad típica de la zona valenciana. Primero le tocó el turno al ‘toro de San Nicolás’, llamado Cubanoso, de la ganadería del Puerto de San Lorenzo, quien realizó el recorrido urbano habitual hasta alcanzar la plaza de SanNicolás, entre los recortes y las carreras de los más atrevidos. Una vez en toriles, le tocó el turno al toro puesto por el Ayuntamiento, de la ganadería conocida como Patas Blancas, quien también completó el itinerario previsto.
La fiesta no se quedó ahí, ni mucho menos. La degustación de sopas de ajo y la actuación flamenca de Sarabel eran las citas marcadas de una tarde muy concurrida en Madrigal de las Altas Torres también en peñas y casas particulares.
Por la mañana, los madrigaleños habían rendido tributo a su patrón, San Nicolás de Bari, celebrando misa y procesión en honor al santo en la iglesia que lleva su nombre.
Este año el sol fue el gran protagonista, lo que, junto al adelanto de la cita en media hora, contribuyó a impulsar si cabe la afluencia de público, que fue similar e incluso superior a la de otros años, según cuentan algunos fieles asistentes. Así, unas cinco mil o seis mil personas volvieron a darse cita con un festejo popular del que disfrutaron de lo lindo los aficionados y que, además, se desarrolló sin incidentes de importancia.
Con la organización de la Asociación Cultural Taurina San Nicolás, la plaza del Cristo volvió a ser el punto de partida para la suelta de los toros desde el cajón, modalidad típica de la zona valenciana. Primero le tocó el turno al ‘toro de San Nicolás’, llamado Cubanoso, de la ganadería del Puerto de San Lorenzo, quien realizó el recorrido urbano habitual hasta alcanzar la plaza de SanNicolás, entre los recortes y las carreras de los más atrevidos. Una vez en toriles, le tocó el turno al toro puesto por el Ayuntamiento, de la ganadería conocida como Patas Blancas, quien también completó el itinerario previsto.
La fiesta no se quedó ahí, ni mucho menos. La degustación de sopas de ajo y la actuación flamenca de Sarabel eran las citas marcadas de una tarde muy concurrida en Madrigal de las Altas Torres también en peñas y casas particulares.
Por la mañana, los madrigaleños habían rendido tributo a su patrón, San Nicolás de Bari, celebrando misa y procesión en honor al santo en la iglesia que lleva su nombre.
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