10 sept 2015

Villoria y Cantalapiedra brillan por sus encierros de vaquillas y novillos

Villoria y Cantalapiedra brillan por sus encierros de vaquillas y novillos

Los novillos dejaron ayer algún susto en Cantalapiedra durante el encierro que tuvo lugar por la mañana.
Los novillos dejaron ayer algún susto en Cantalapiedra durante el encierro que tuvo lugar por la mañana. / JORGE HOLGUERA
  • Ambas localidades celebraron encierros matinales, tuvieron corrida de rejones y contaron con una verbena por la noche


Ayer, por ser domingo, fue uno de los días más intensos de las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Vega de Villoria y de las de los novillos de Cantalapiedra. En ambas localidades hubo mucha gente que no durmió, al menos los programas se prestaban para ello. Las dos grandes villas tuvieron noche animada por verbenas y por discoteca móvil. Al ser la noche del sábado, tanto Julián Barrera, alcalde de Villoria, como Juana González, alcaldesa de Cantalapiedra, ya habían sido previsores a la hora de contratar las mejores orquestas para sus pueblos. En Villoria actuó la orquesta De la luna y en Cantalapiedra la orquesta Flamingo. Hubo música en ambas localidades hasta las ocho de la mañana.
En Cantalapiedra a esa hora, para recargar energías, hubo degustación de pastas y aguardiente y comenzó la diana floreada a cargo del grupo musical Villa de Cantalapiedra. En el mismo instante empezó la alborada por el pueblo de Villoria. Acompañados de la charanga El Tinglao fue una marea de peñistas que bañaban las calles de color y de alegría hasta el recorrido del encierro, donde a las nueve de la mañana se soltaron las vaquillas.
En el lugar de costumbre, se llevaron a cabo las vaquillas en Villoria. Estuvieron marcadas por la enorme presencia juvenil. Una a una de forma individual se fueron soltando hasta tres elegantes ejemplares. Primero fueron corridos por los jóvenes y posteriormente hubo valientes recortadores e incluso alguno que se atrevió a saltarlas. El espectáculo estuvo animado y el personal entretenido, para cerrar se corrieron las tres vaquillas juntas hasta la hora acordada para su final.
Los más taurinos pudieron disfrutar de los encierros de estas dos importantes villas pues hasta las doce no dio comienzo el de Cantalapiedra. El recorrido es bien diferente y las reses de mayor edad, pues como manda la tradición, en Cantalapiedra se soltaron novillos.

Dos grandes astados de buen porte y piel marrón fueron liberados uno a uno dando espectáculo, y el primero de ellos unos revolcones a un atrevido, por lo visto de Madrigal de las Altas Torres, que se llevó un buen susto y que se volvió para casa.

Los novillos subieron y bajaron en numerosas ocasiones y uno tuvo que ser cargado en el camión para poder terminar en hora. Al finalizar, en la plaza, hubo suelta de vaquillas y un novillo más.
Por la tarde tanto en la gran plaza de toros La Vega de Villoria como en la de los Hermanos Celador Zurdo de Cantalapiedra hubo corridas de rejones. Y para continuar las fiestas, verbena a cargo de la orquesta Kronos en Villoria y de la orquesta Nevada en Cantalapiedra.
http://www.elnortedecastilla.es/salamanca/201509/07/villoria-cantalapiedra-brillan-encierros-20150907124849.html

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